INTERPRETACIÓN DE
Normas Internacionales de Información Financiera – NIIF
Marco Conceptual para la Información Financiera
Estatus y Propósito del Marco Conceptual
Párrafo SP1.2
El Marco Conceptual no es una Norma. Ningún contenido del Marco Conceptual prevalece sobre ninguna Norma o requerimiento de una Norma.
Siempre hemos sostenido la importancia del contenido del Marco Conceptual. Lo hemos calificado como valioso resumen de la doctrina contable formada a lo largo de mas de cinco siglos, desde que, según la historia, Luca Pacioli, impulsó la sistematización de los registros contables para elaborar la información financiera.
Es esta doctrina la que ha venido sosteniendo la atención a las expectativas informativas de los distintos usuarios de los estados financieros. Se privilegió en ello la neutralidad y el carácter fidedigno de su contenido. No podía ser de otro modo. Decía Aristóteles que “Todos los hombres desean por naturaleza conocer la verdad”.
Sin perjuicio del idiosincrático pensamiento de cada colectividad, en el que se desarrollan y evolucionan los negocios, la doctrina contable ejerció una sensata presión en las políticas y prácticas aplicados para la preparación y presentación de los estados financieros. No obstante, aquella idiosincrasia favoreció otros factores o intereses que distorsionaron el propósito doctrinal.
Aunque no es el propósito de esta exposición, entrar en el análisis o detalle justificante de cada particular punto de vista, debemos reconocer que en el Perú, una fuerza notable, inclinó tales políticas y prácticas hacia la necesidad particular de atender requerimientos fiscales aplicando criterios de reconocimiento y medición de los efectos económicos, basados en factores o índices direccionados.
Ello explica que la declaración del Marco Conceptual, no obstante, su espíritu doctrinal, sea la de negar su carácter normativo, porque de este modo, se impide la arbitrariedad o el sesgo que pudiera desarrollarse en quienes sin sentirse obligados normativamente podrían atribuir falsas argumentaciones doctrinales para sustentar una verdad mediocre ú ocultarla.
Aunque pareciera existir un divorcio entre la doctrina contable y su ordenamiento normativo, resulta claramente evidenciado que el contenido de cada una de las normas contables, responden a la necesidad de construir información financiera útil, para los distintos usuarios, fin supremo de toda información que será usada para tomar decisiones, con independencia de quien las tome.
No quisiéramos levantar sospecha de indiferencia a otros factores de interés para cierto segmento de usuarios. Estamos convencidos de la imperiosa necesidad de respetar y atender las regulaciones tributarias de cada país. Pero esto no justifica de modo alguno la deformación informativa, por el contrario la vuelve amenazante de decisiones acertadas.
La expresión “Ningún contenido del Marco Conceptual prevalece sobre ninguna Norma o requerimiento de una Norma”, no debe ser entendida como la negación de la doctrina contable. No existe tal tesitura. Esta es una reafirmación de las consideraciones doctrinarias elevadas al rango normativo, para evitar dislocamientos entre la realidad de los negocios y su instrumento informativo.